El terminal de buses y taxis de Arica y el Arena Puerto Montt, entre otros recintos, han sido dispuestos para otras actividades.
Edificios tan diversos como un terminal de taxis y buses, un cuartel policial, hoteles y recintos deportivos y de eventos a lo largo del país tienen en común que ahora se han reconvertido para un uso distinto al que estaban destinados, producto de la pandemia.
En Arica, el alcalde Gerardo Espíndola anunció que el terminal de buses y taxis que realizaban recorridos hacia ciudades de Perú y Bolivia será empleado como una oficina de derechos humanos. “No podemos ser indiferentes ante el drama de la migración, ni al tráfico ni a la trata de personas”, dijo.
El complejo fue remodelado en los últimos meses con una inversión de casi $600 millones que permitió la instalación de estructuras de madera, 40 módulos para venta de pasajes, mobiliario y jardines, entre otras comodidades. También fueron ampliadas las instalaciones para la llegada, salida y estacionamiento de vehículos en un recinto que tenía un flujo diario de hasta seis mil usuarios.
Casi en el otro extremo del país, en Valdivia, el municipio local fue autorizado por Bienes Nacionales para utilizar un ex edificio de la Policía de Investigaciones y destinarlo como un centro integral de salud que complemente con diversas especialidades, incluyendo atenciones de salud mental y odontológica, el de los centros de salud familiar (Cesfam) de la zona.
En Valparaíso, la Pontificia Universidad Católica de esa ciudad, tras una inversión superior a $500 millones, adquirió un inmueble que perteneció a un concurrido bar para instalar ahí una sede de su Instituto de Geografía. En la vecina Viña del Mar, en tanto, el emblemático Hotel O’Higgins desde abril de 2020 se ha consolidado como “residencia sanitaria” y un centro de atención de pacientes contagiados con covid-19. El recinto actualmente tiene un 75% de ocupación y 277 camas disponibles.
En la capital de Los Lagos, el Arena Puerto Montt, que es el mayor centro de votaciones en esa región, además de escenario de competencias deportivas y espectáculos artísticos, desde el inicio de la pandemia fue destinado a la salud municipal. “A diario se vacunan entre 2.000 y 2.500 personas, tano por coronavirus como por la influenza”, explicó el director de Salud Municipal, Miguel Aravena.
En Chillán, un inmueble donde hace dos décadas funcionaba un consejo ecológico de educación ambiental, y luego ocupado con otros fines, será destinado por Bienes Nacionales a asociaciones que entregan ayuda social a menores de edad.
Fuente: El Mercurio